Todo lo que Dios hace es absolutamente maravilloso, aun aquellas tan rutinarias para nosotros como amanecer con vida cada mañana o dormir bajo techo cada noche, todo esto es muestra de su grandeza y misericordia para con sus hijos; ya que existen personas que no gozan de tales favores y aun en sus necesidades no reconocen su necesidad tanto física como espiritual de Dios.
En tal caso, que las personas neciamente niegan a Dios y no se dan cuenta que le necesitan mas que a la vida misma, estamos nosotros, quienes también en muchas ocasiones nos olvidamos que todo lo que necesitamos es provisto por la mano de Dios, razón por la cual deberíamos vivir agradecidos diariamente y consientes de que estamos rodeados por el amor Paternal de Dios.
El profeta Joel describe en el capitulo 2: 21 del libro que lleva su nombre en la Biblia, que la tierra (la creación) debe gozarse y alegrarse porque habrían de ver las grandes cosas que hará Jehová, ya que pasarían de la escases a la abundancia y de la soledad a la llenura; todo esto porque Dios habría de manifestar su bondad con su pueblo; lo que nos muestra como cambian las cosas cuando Dios hace su bondad con sus hijos.
Esto nos muestra que nosotros también debemos sentirnos gozosos porque Dios es providencial; ya la Biblia nos describe como Dios promete no desampararnos y hasta Jesucristo mismo prometió estar con nosotros todos los días (Mateo 28: 20) debemos pues alegrarnos y confiar que el mismo Dios que no desamparo a su pueblo, no nos dejara ahora que nos ha adoptado como sus hijos.
Por lo tanto y como producto de la confianza puesta en Dios, debemos alegrarnos de manera que vivamos felices y agradecidos todos los días, aun los días oscuros y grises cambian de color y brillan para el corazón agradecido con su Creador, y nosotros debemos vivir siempre con la mirada puesta en Dios, ya que Dios provee abundantemente y da consuelo al abatido y desesperado que pone su fe en él.
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