El consejo de Dios permanece

Las personas hacen planes, construyen sueños, se proponen metas y se inventan objetivos, pero solamente el consejo de Dios prevalece y permanece para siempre sobre cualquier pensamiento de los hombres; es por esa razón que los hombres (y mujeres) al planificar cualquier cosa, deben tomar en cuenta a Dios y someterse a su santa, soberana y buena voluntad.

Es normal que todos tengamos nuestros propios sueños y metas, pero debemos considerar que como humanos estamos limitados en muchas cosas y una de ellas es de saber el futuro, aunque tengamos alguna idea no podemos decir exactamente que pasará; es allí donde lo mas razonable es considerar a Dios y comprender que nada escapa de su poder y conocimiento, por lo que consultarle y seguir su consejo es lo mejor que alguien puede hacer.

Lamentablemente los humanos somos tercos también y preferimos caminar a ciegas que bajo la luz de Dios, claro que esto se debe al pecado que esta en nosotros, el cual nos hace huir de la corrección y de la sabiduría; mas los cristianos hemos recibido por medio del evangelio de Jesucristo una nueva vida, capaz de obedecer la voluntad de Dios y de seguir el consejo divino, aprovechemos esta bendición y dejemos de guiarnos por nuestros pensamientos y sigamos el consejo perfecto de Dios.

La manera correcta de buscar a Dios

La mas grande y antigua necesidad de los humanos ha sido siempre buscar a Dios y esta hoy en día debería ser la mayor prioridad humana, sobre todo para quienes nos consideramos cristianos; y buscar a Dios significa que deberíamos empezar a poner sobre balanza nuestras propias metas y darnos cuenta que muchas veces no estamos buscando nada mas que nuestros propios gustos y estamos mas interesados en esta vida temporal que en las cosas espirituales.

En 1 Crónicas 22: 19 podemos leer la exhortación del conocido Rey David a su pueblo a levantar el antiguo templo para Dios, para ello les hace un llamado a poner sus corazones y sus ánimos en busca de Dios, ya que cualquier otro esfuerzo humano que no fuera acompañado de estos ingredientes seria solamente acciones vanas y religiosidad sin valor.

Debemos comprender nosotros que es necesario que cualquier cosa que hagamos para Dios debe ser hecha con corazón y animo, ya que si no lo hacemos así, solo estaríamos haciendo buenas acciones con malas intenciones; al buscar a Dios con corazón y animo estaremos demostrando nuestras intenciones y nuestro verdadero deseo por encontrarle, además de que nos sentiremos plenamente confiados y felices. Volvamos a estos principios y busquemos el rostro de Dios en todo momento, con mucho animo y de todo corazón, para que así nuestra búsqueda no sea infructuosa y estéril, sino que pueda traernos dicha y verdadera fe de sabernos por el camino que Dios quiere para nosotros.

la voluntad de Dios

Estaba pensando acerca de como las personas nos afanamos por ser felices a cualquier costo; sacrificamos nuestras vidas, las vidas de nuestros familiares y todo lo que tenemos por lograr éxito y prosperidad porque pensamos que esto nos llenara de satisfacción. Pero cuando nos damos vuelta vemos que desperdiciamos tiempo, esfuerzo y vida por lograr cosas que solo son temporales y se marchitan; sin darnos cuenta que podemos ser eternamente felices si desde el comienzo buscamos a Dios y hacemos su voluntad

Todo lo que hagamos sobre esta tierra, sea para bien nuestro o el de otros simplemente terminará sin darnos mas que momentánea alegría, sin embargo hacer la voluntad de Dios tiene resultados que perduran por siempre y que se pueden disfrutar en todo momento; satisfacción mas allá de la comprensión humana y mucho mejor que cualquier placer mundano, son los beneficios de una vida recta haciendo lo que Dios demanda.

Pensemos detenidamente en cuanto tiempo invertimos por cosas que no duran lo suficiente y que no logran llenar el vacío existencial (pecado) que como personas tenemos, nos daremos cuenta que valioso tiempo hemos perdido añorando cosas vanas; ahora veamos lo que dice 1 Juan 2: 17 este texto nos dice que aquellos que obedecen la voluntad de Dios, no solo disfrutan sino que permanecen, es decir que dejan esta vida y llegan a la eternidad disfrutando del deseo de Dios y su buena voluntad.

No conocen a Dios

Las personas en este mundo se burlan de nuestra fe porque no conocen a Dios ni a Jesucristo nuestro salvador, por tal razón ellos ven nuestra convicción como sin valor ni sentido; mas aquellos que aunque no conocimos en persona a Jesucristo ni hemos visto a Dios con nuestros ojos, si conocemos el evangelio y se nos ha revelado la verdad contenida en la Biblia, podemos con certeza y convicción decir que le conocemos y que no hay verdad mas cierta y mas bella que pueda convertir el alma.

Lo cierto que a Dios se le conoce por la fe, por la revelación del Espíritu Santo al corazón del hombre cuando este escucha la predicación del evangelio, es allí cuando Dios se manifiesta para dar salvación y vida; de lo contrario las personas solo escuchan acerca de Jesús y de Dios como si escucharan hablar de alguna persona honorable; es allí que debemos comprender la grandeza del favor divino que se nos ha entregado y compartirlo como tal.

Sabemos que el evangelio y las escrituras son verdaderas porque Dios ha querido revelárnoslo y debemos compartirlo con mucho afán, orando para que otros conozcan la verdad y puedan decir "Ahora conozco a Dios" y comprender a quienes aun no han recibido tal don y cuanta es su necesidad; tener esta perspectiva nos ayudara a amar lo que Dios ha hecho en nosotros y amar a quienes aun no le conocen.

Se acordarán de Dios

Cuando todo va mal, no hay salidas y se han perdido las esperanzas, siempre podremos contar con Dios para que pueda auxiliarnos; y es maravilloso saber que aunque todos fallen, los cristianos podemos vivir confiados y seguros de que encontraremos refugio en aquel que todo lo puede y que siempre cumple a sus promesas.

La oración de todo creyente es y debe ser por que las naciones y pueblos escuchen el evangelio de salvación en Jesucristo para que las personas experimenten la gracia que hemos conocido y encuentren el refugio que nosotros tenemos; Porque muchas personas buscan refugio en Dios solo cuando se encuentran sumergidos hasta el cuello de problemas, allí se acuerdan de Dios. 

Pero el verdadero interés de las personas se acaba cuando se ven resueltos sus problemas, pero el salmo 22: 27 dice que deben buscarle, esto significa que deben realmente interesarles encontrar a Dios, con verdadera fe y convicción que solamente en él pueden ser salvados. Esa misión de proclamar las verdades de Dios esta en nuestras manos para que todos glorifiquen y honren a nuestro Salvador.

Hagamos que la gente deje de buscar a Dios solo cuando le necesitan y demostrémosles con nuestras acciones que Dios esta allí para todo aquel que se acerca creyendo en él, mostremos a Jesucristo como único y verdadero camino a la verdad y la única esperanza para el perdido y extraviado; demostremos que Dios es Dios tanto en la abundancia y la prosperidad como en la necesidad y la angustia. Si vivimos demostrándole a la gente se acordaran y se volverán desde todos los confines de la tierra.

Dios es bueno y misericordioso

Dios es bueno y tiene misericordia sin fin, aunque algunos dudan de ello debido a las situaciones terribles que atraviesan, pero debemos entender que la bondad y la misericordia de Dios es diferente a la idea moderna que muchos tienen, ya que algunos piensan que bondad de Dios es recibir tesoros y misericordia es que pueden pecar cuanto quieran y nada malo les pasara, pero ¿Qué es la bondad y la misericordia de Dios?

El concepto para definir los términos de bondad y misericordia de Dios serian muy grandes, pero podemos resumir que es esa gracia de parte de Dios que nos asegura su intervención y participación en las circunstancias que vivimos, aun cuando muchas de estas circunstancias las hemos provocado nosotros; también debemos aclarar que no siempre las circunstancias cambian inmediatamente pero si nuestra actitud hacia ellas debido a la intervención de Dios con su bondad.

Para que lo entendamos mas fácilmente solo debemos mirar hacia atrás y recordar los momentos en los que estuvimos afligidos y como Dios proveyó una salida o una solución que no esperábamos, así como en otras ocasiones la respuesta divina  no fue inmediata pero nos sentimos llenos de paz porque comprendimos que esto lo estaba permitiendo y controlando el Señor. Lo que pasa es que en muchas de estas circunstancias no llegamos a ver cuan grande es la misericordia de Dios hasta que ya han finalizado.

Debido a su enorme bondad y gran misericordia es que debemos aclamar a Dios y a Jesucristo si hijo, porque primeramente es merecedor y digno de toda alabanza y en segundo lugar porque las cosas obran para el bien de los cristianos (aun las cosas negativas a nuestro parecer) debido al control que Dios tiene sobre estas cosas; si hacemos un ejercicio mental y pensamos nuevamente en las circunstancias que hemos vivido e imaginamos que hubiese sido si Dios no hubiera intervenido, nos daremos cuenta que nuestra vida ha sido librada en muchas ocasiones, todo esto porque él es bueno y su misericordia es eterna.

Dios es nuestro Rey

Cuando Dios gobierna nuestras vidas no debemos tener temor alguno; ya que estamos en época de cambios sociales a nivel mundial también ha aumentado la preocupación y el nerviosismo entre muchos que piensan cuanto les ha de afectar las decisiones mal tomadas de los hombres de autoridad; a todos aquellos creyentes que sienten la misma preocupación les escribo para decirles que dejen de hacerlo, pues sobre toda autoridad esta primero la autoridad de Dios.

 Los Israelitas en tiempos del profeta Isaías tenían temor por las constantes invasiones que venían a ellos y de los malvados reyes que les imponían cargas y esclavitud; mas Dios les dice que por medio de su siervo que tendrían salvación mientras Dios fuese su Juez, Legislador y Rey (Isaías 33: 22). Solamente debían conservar su confianza y fidelidad a la autoridad divina, y a pesar de las calamidades que vendrían seguía siendo él quien permitía y controlaba todo.

En nuestros tiempos las cosas no parecen mejorar mucho, aunque no padezcamos esclavitud si nos vemos afectados a los cambios a nuestro alrededor, afectan a nuestras familias, a nuestras iglesias y a nuestra libertad social; pero podemos vivir confiados si mantenemos nuestra mentalidad puesta en el hecho de que no son los hombres quienes toman las decisiones porque tengan autoridad propia, sino que Dios es juez y rey soberano sobre todo y que solo él puede permitir que las cosas sucedan.

Si algo nos afecta, pensemos que son permitidas por Dios y si pensamos que no esta bien, oremos y solicitemos que sea el Señor quien mueva los corazones de los gobernantes a buenos caminos; si queremos tener paz seamos luz entre los que estamos y roguemos al Dios de los cielos que nos conceda reflejarla en nuestra sociedad, confiemos que solo Dios salva y puede cambiar el rumbo no solo de las personas sino también de las naciones si así lo permite.