Existen cientos de miles de personas que no pueden dormir por las noches, y no es por causas físicas, muchas de estas personas justifican su insomnio con achaques, problemas y deudas, sin embargo el problema es mas profundo, el problema es espiritual y realmente ese es un problema serio cuando la conciencia no permite dormir; sin embargo hay una solución a este problema, la solución es Jesucristo.
La Biblia nos dice en el Salmo 3 que el escritor se sentía tan confiado en Dios que era capaz de acostarse, dormir y despertar de manera que para el era placentero ya que era Dios quien lo sustentaba durante todo esto; y eso es algo de lo que todo aquel que se ha acercado a Cristo y ha experimentado un nuevo nacer en la familia de Dios puede comprender.
Sabemos que la única manera de calmar una conciencia intranquila es la confesión; si, la confesión de nuestros pecados a Dios y buscar socorro en Jesucristo, quien pago por aquellos que con fe se acercan, esto abre las puertas a la familia de Dios y a la confianza con Dios, la cual es vital para poder dormir tranquilamente.
Que bello es descansar en los brazos de Dios, creo que ningún colchón sobre la tierra se puede comparar, por muy cómodo y fino que sea, a dormir sabiendo que estamos en paz con el Creador; por lo que la invitación esta hecha a todos aquellos que están pasando una mala noche, a buscar esa reconciliación con Dios, solo acerquémonos confiadamente e imploremos su misericordia, para empezar a experimentar noches de sueño, en el regazo del buen Pastor.
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