jueves, 9 de julio de 2015

La protección de Dios para quienes obedecen su voluntad

Consejos, en todas partes escuchamos consejos, de toda clase y de toda fuentes, todos bien intencionados y de parte de personas respetables y con muy buenas intenciones; sin embargo nada es ni sera comparable con el eterno, exacto, sabio y santo consejo de Dios escrito en su palabra, la que nosotros conocemos como Biblia.

¿podemos confiarnos en los consejos de un antiguo libro? ¿tienen mayor peso las cosas escritas por hombres comunes de la Escritura? Veamos a la luz del texto, la confirmación de estas verdades y como podemos nosotros confiar plenamente de su exactitud y cabalidad.


La fuente del consejo

Para empezar tenga por seguro consejo la Biblia, porque estamos convencidos que proviene de Dios, mucha gente que no cree señala este argumento como sin sentido, pero quienes hemos leido Las Escrituras como la inerrante voluntad de Dios, eso es porque no hemos leido superficialmente y hemos visto su veracidad en muchos campos, no solo cientificos, sino de valor y trascendencia y ningun libro escrito por hombres tiene el peso de la verdad sobre si como lo que esta en la Biblia.


La trascendencia

Claro que aunque han pasado siglos desde que fue escrita, la Biblia aum posee la misma veracidad y cualidad de poder aconsejarnos, de no ser asi, que sentido seria estar leyendo estos parrafos, y como testigos estan millares de personas que no salen a la calle sin ser iluminados cada dia por la biblia, pues solo ella puede dar aliento y vida.


Podemos pues confiarnos en ella porque proviene de Dios y es para todo ser humano en cualquier tiempo y lugar, veamos tambien que el texto dice que su palabra es limpia, es decir su procedencia es pura y que tal pureza protege cual escudo a quienes en esa verdad se arropan.

CONCLUSION:
Si te sientes cansado y abatido, ve al mas puro y sano consejo sobre la tierra, la Palabra de Dios. Cuando sea y donde sea y para quien sea.

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