viernes, 26 de junio de 2015

¡DEL DICHO AL HECHO!


Bendiciones a todos, me disculpo porque tarde en publicar otro sermón, he tenido una semana agitada pero aca esta otra para que lo disfruten y mediten en ello, sientanse en la libertad de compartirlo con otros hermanos, siempre y cuando sea para edificación y cualquier comentario estamos a su servivio, nuevamente bendiciones.

DEL DICHO AL HECHO

Dios Conoce las intenciones tanto como las acciones del creyente
San Juan 13: 36  38 

OBJETIVO: Que el creyente realice acciones equivalente a sus intenciones, llevar a la practica una vida consistente a la proclamación del cristianismo.

La iglesia cristiana de hoy en día habla mucho acerca de lo que es capaz de hacer (eventos, reuniones masivas, conciertos, etc.) y los resultados se ven por millares que se acercan a la fe; lo extraño comienza al contar la innumerable cantidad de supuestos profesantes que prontamente abandonan todo, viviendo en fracaso y angustia sin que reflejen un nuevo nacimiento. 

El relato de Pedro refleja grandemente este cuadro que debe ser cambiado en cuanto sea posible puesto que el pueblo de Dios urge de hacedores de historia y no solamente soñadores.

El deseo del creyente (v. 36)

Pedro tenía un deseo que no podría llevar a cabo (seguir a Cristo) por el momento no era capaz y su deseo no era mas que pensamientos sin bases mas que en el emocionalismo, el no había medido la fuertes consecuencias de su deseo, para no caer en este error debe haber un auto examen y proyectarnos ¿Qué pasará conmigo si decido seguir a Cristo?

Proyectarnos implica medir las consecuencias  y las adversidades que trae el ser cristiano, Jesús lo advirtió (En el mundo tendréis aflicción Juan 16: 33) dejarnos llevar por deseos es deslumbrantemente decepcionante. Buenos deseos no bien pensados produce personas fracasadas y agobiadas, crea cristianos débiles e insatisfechos y fomenta herejes decepcionados del cristianismo.

 Las intenciones del creyente (v. 37)

Al escuchar la respuesta de Jesús, Pedro reprocha demostrando su deseo con sus buenas intenciones, ahora bien las buenas intenciones deben ir acompañadas de buenas acciones, muchas de las personas que expresan algo con seguridad no lo harán nunca; el hablar con determinación no es incorrecto, pero el hacerlo irresponsablemente si lo es.  

La mejor excusa para la irresponsabilidad son las buenas intenciones, muchos de los fracasos comienzan con Yo quería y terminan con  pero no pude el hablar rápido y sin pensar trae consecuencias; muchos evaden su responsabilidad demostrando sus intenciones pero nunca hablan en términos reales. La iglesia carece de hacedores pero esta llena de soñadores

Las acciones del creyente (v. 38)

Cristo sabia que Pedro le negaría, sabia que sus acciones serian contrarias, aun así rogó por su fe (Lucas 22: 31  32) en términos reales las acciones son la exteriorización de las intenciones y estas a su vez de los deseos. Al igual que Pedro, Cristo conoce nuestras áreas débiles, pidamos que el nos ayude y no nos conformemos a una vida pasiva. 

Si en una vida no se muestran resultados coherentes, es necesario hacer un análisis de lo que creemos que queremos. La Biblia afirma que hemos sido creados para buenas obras (Efesios 2: 10) y que no para buenas intenciones (Santiago 2: 15  16) Una iglesia que no evangeliza se fosiliza y no hacer nada es el camino para no ser nadie.

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