La verdadera actitud de agradecimiento
1 tesalonicenses 5:18
El apóstol Pablo exhorta al final de su segunda carta dirigida a los tesalonicenses en varios aspectos de la vida cristiana y entre estos aspectos está el ser agradecido, pero ¿por qué colocar el agradecimiento entre aquellos pilares de conducta cristiana tales como: la oración, el constristamiento del Espíritu o las profecías?
La respuesta es clara y es que Pablo veía de igual importancia como la oración y las enseñanzas, que los creyentes aprendiesen a ver la soberana voluntad de Dios en todo lo que pasaba, ya fuese una adversidad o una bendición y fuesen agradecidos; el problema está en que hoy en día hemos despreciado este vital aspecto de la vida en la fe debido a muchas cosas
- medimos a Dios por las circunstancias
- tenemos una falsa idea de un Dios de prosperidad absoluta
- poseemos poco entendimiento de la soberanía de Dios
Vamos a aprender a ser agradecidos y a darle la relevancia que necesita en nuestras vidas un principio tan importante; y lo haremos viendo tres actitudes que sobresalen de un verdadero sentido de agradecimiento hacia Dios, que el apóstol Pablo enseño a sus receptores:
Dad gracias en todo - el agradecimiento es una actitud continua (v. 18 a)
Cuando el apóstol pide a los creyentes que sean agradecidos no se limita a sus momentos felices y por eso les enfatiza diciéndoles "en todo" lo que se refería a todas las circunstancias, a todo momento y a todo lugar; es decir que su gratitud fuese de manera continua, al punto que se formase en ellos un carácter natural y cotidiano. ¿Cómo lograrlo?
La clave está en ver "a Dios en todo" no a las circunstancias ni a los momentos negativos; es verlo en todo y agradecerle porque él está allí. Si Dios no estuviera en todo lo respecta a la vida del cristiano sus promesas serian falsas (Mateo 28: 20) y eso jamás pasará, el no sería fiel (2 Timoteo 2: 13) y eso es imposible; el texto no nos dice "por todo" sino "(a Dios) en todo" lo que significa que el siempre estará allí.
Si nos convencemos de esa realidad (que Dios está con nosotros en todo momento) será más fácil que surja de nosotros este carácter de gratitud, pues siendo así significa que nada puede salir realmente mal y que no nos enfrentamos a lo que nos parece malo nosotros solos, otro aspecto a tomar en cuenta es que lo que nos parece negativo podría haber sido peor si Dios no nos hubiese acompañado desde un principio.
Porque esta es la Voluntad de Dios - el agradecimiento es una actitud de obediencia (v. 18 b)
¿El que es la voluntad de Dios según este texto? "Todo" lo que pasa (las circunstancias) o el "dar gracias" (actitud) podemos decir realmente que las dos cosas puesto que: "Dios lo permite todo" (Dios decreta que pase) y "Dios está allí cuando pasa" (él está de nuestro lado cuando las cosas pasan)
En este texto en particular y aunque las dos cosas anteriores son la voluntad de Dios, se hace referencia a que es su voluntad y su deseo que nosotros, como hijos suyos y fieles creyentes en cristo, tomemos una actitud correcta viéndole a él como autor y controlador de toda circunstancia, pero también que veamos a su providencial mano de gracia que nos sostiene aun en el más profundo valle y el más ardiente fuego y como este nos saca adelante demostrándonos que si no nos hubiese sostenido en su regazo habríamos caído muertos y sin esperanza en tales desdichas.
En sentido, su voluntad nos lleva por la vida en etapas en las que el espera nuestra gratitud y bendición y gloria a él porque aunque el permite lo negativo, él se encuentra con nosotros en ese momento, razón por la cual no desfallecemos. Y al hacerlo le estamos obedeciendo, y al obedecerle conocemos su voluntad y solo así comprendemos que es agradable y perfecta (romanos 12: 2)
Para con vosotros en Cristo Jesús - el agradecimiento es una actitud cristiana (v. 18 c)
Por últimos Pablo dice que todo eso debe hacerse “en Cristo Jesús”, es decir que el agradecimiento en todo momento y circunstancia es un valor que solo los verdaderos creyentes (aquellos que se encuentran firmes en la roca de salvación) pueden evidenciar, obviamente esto se debe a que aquellos que conocen verdaderamente su fe, también tendrán las convicciones claras sobre quien es Dios y como él es soberano señor de todo.
Pero también nos habla de la manera correcta de presentar nuestra gratitud, esta debe ser “en cristo Jesús” siempre, o por decirlo mejor, reconociendo que no somos nosotros ni nuestras fuerzas, sino solo la gracia y el favor que Dios demostró hacia nosotros a través de Jesucristo lo que nos permite gozar de su guía y dirección divina, es en ese mismo medio de salvación que nosotros debemos ser agradecidos.
Si algo bueno nos ha pasado, o algo malo nos aconteció veamos hacia la cruz que dista en el sendero angosto, donde nuestro camino comenzó, démonos cuenta que todo lo ha permitido para su gloria y nuestro bien y que mayores penas sufrió aquel que siendo inocente, fue colgado en un madero y su sangre entrego por nosotros, agradezcamos por lo que pasa y lo que no, por lo que permite y lo que nos quita, mejores sendas que recorrer no hay sobre la tierra; recordemos que es preferible pasar por el valle de sombras tomados de su mano ahora que desamparado antes de conocerle, demos gracias.
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